Cristianos fraudulentos
Tanto los libros de éxodo, levítico también números nos habla de no engañar a los demás. Pero de manera específica mencionaremos el libro de levítico cap. 19:13, nos dice que no debemos oprimir a prójimo.
La palabra prójimo se refiere al próximo, o sea persona cercano a usted, y en otro lenguaje secundario, se refiere a tu semejante.
Pero muchos llamados cristianos han optado por ser totalmente fraudulentos. Hacen muchos negocios usando el evangelio como escudo,
Presentan una santidad fingida para poder atrapar a sus victimas. Fíjese que esos depredadores siempre viven usando el nombre de Dios en primera instancia cuando van a realizar un negocio.
Siempre tienen la cara de un ángel y siempre tienen personas de alta escala de liderazgo eclesiástico que los defienden, porque esos líderes están atrapados en la red de sus engaños.
Son difamadores, y sin embargo tienden a dar siempre 10 pasos delante de sus victimas para cuando sus victimas hablen, sus palabras sean dudosas.
Lo peor del asunto es que esos fraudulentos son muy finos, astutos y muy protegidos.
Fíjese que siempre tienen líderes que están cerca de ellos, a veces familiares, amigos y aliados. Son difíciles de descubrir porque son muy escurridizos. Y tienen algo en particular, son, los que más ayunan, oran en voz alta y siempre viven contándoles cosas a los líderes y acusando a hermanos para llamar la atención y así encubrir sus verdaderas caras del engaño.
A veces son hombres y mujeres también. Te dicen una palabra usando el nombre de Dios como escudo, pero cuando se ven atrapados, se atreven a decirte en tu cara. ¿Hermano, cuando yo dije eso? Le discuten con tal firmeza que el que queda como mentiroso es usted. Y como su círculo esta preparado como escudo protector, comienzan a defenderlo y a aplastarlo a usted.
Pero solo nos queda que Dios los destape algún día. Porque esos fraudulentos son asesinos espirituales, emocionales y mentales.
Matan en silencio y no hay forma de comprobar que son los autores intelectuales de los hechos.
Muchos de esos cristianos son dueños de empresas que contratan a cristianos humildes y les pagan un salario por debajo de lo que esta establecido por la ley. Además le aplican un horario súper rígido más que un no creyente, y si ese alguien esta medio frio, como término que usan frecuentemente, lo cancela. Porque entiende que ese podría despertar y reclamarle, entonces para evitar eso, lo cancela y lo desacredita diciendo que porque ese era un impío y que en sus negocios no trabajan impíos.
Trate usted de evitar a esos fraudulentos que tiene una careta de muy buena calidad que no se rompe fácilmente.
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